Los estudiantes secundarios de Argentina. Su irrupción en el espacio público como actores políticos (1956-1958)

Cañón Voirín, J.L. (2015): "Los estudiantes secundarios de Argentina. Su irrupción en el espacio público como actores políticos (1956-1958)", en Argirópolis. Ensayos en Ciencias Sociales", nº 1, p. 3-18

La Revolución Libertadora, tal como se autodenominó el frente golpista que derrocó al gobierno peronista, articuló un complejo y heterogéneo bloque. Y si bien no pueden pasarse por alto las diferencias en su interior, hubo coincidencias de conjunto al momento de caracterizar la situación del país, describiéndola como un estado de crisis. Al respecto cabe señalar la consideración de los obispos argentinos, que al presentar el Libro Blanco de la Iglesia Católica (1955), se refirieron a la crisis como una consecuencia de la falta de “orden real y jurídico que fomenta la tranquilidad que es la paz, por ser tranquilidad del orden”. La proclama de inicio del golpe de Estado sentenció ese desorden por haber servido para “el auge de la corrupción y para la destrucción de la cultura.